Sushihana, ¿Se debe dejar propina por un mal servicio?

Buscando un lugar dónde comer sushi en un día de lluvia, llegamos a Sushihana en Mall Alto Las Condes. El restaurant estaba vacío, tomamos asiento y al paso de unos segundos se acercó una amable garzona para entregarnos la carta. En el menú todo se veía muy apetitoso, entonces decidimos pedir de aperitivo unas Gyosas, y unos rolls envueltos en salmón y palta para comenzar. Esto acompañado de una copa de Champagne y Chardonnay.

Sushihana de Mall Alto Las Condes.

Llegaron a nuestra mesa las Gyosas y las piezas de sushi. Estas masitas orientales (gyosas) para nuestra "mala suerte" estaban durísimas y sumamente calientes, para nada sabrosas. Por otro lado el sushi, no impresionaba, casi peor que cualquiera de los que he probado antes.

Gyosas y sushi de aperitivo.

Para contrarrestar la situación y darle otra oportunidad a Sushihana, pedimos unos platos de fondo que fueron Yakisoba Ebi (fideos con verduras salteadas y camarones), y un plato de arroz, con sésamo y camarones. Al llegar la comida continuamos con las sorpresas, los tamaños eran muy reducidos, no se comparaban al tamaño que aparecía en nuestra carta. 

Plato de fondo.

Nos trajeron los platos y no nos recogieron los que ya habíamos usado. De muy mal gusto. Nada alentador nuestro almuerzo, peor cuando nos dimos cuenta que los camarones no estaban limpios, incluso tenían un desagradable olor. Luego de esto, comenzamos a escuchar una música a todo volumen que casi no nos dejaba conversar. 

Uno de los segundos platos.

Al terminar de comer, llegó la mesera y comenzó apilar los platos y a vaciar los restos uno sobre otro, todo esto en nuestra presencia. Cosa que no se debe hacer nunca, y que es de muy mal gusto apreciar esta escena en un restaurant o donde sea.

Un almuerzo diferente-nada agradable-.

Para finalizar debo decir que Sushihana de Mall Alto Las Condes, no es un lugar económico, ni agradable, ni rico para comer. Su personal que si bien fueron amables al comienzo, no tenían mucha noción de como entregar un buen servicio. Además,  hablaban fuerte, desde nuestra mesa escuchábamos sus comentarios sobre vida personal, experiencias con clientes, "picadas", entre otros. Incluso, nos llamó la atención cuando escuchamos algo así..."¿Alguien les ha reclamado por la gyosas? Es que una abuela casi se quebró un diente con ellas. Luego de eso pensamos si ese comentario era para nosotras, para torturarnos por no dejar la propina correspondiente.  y ahí me pregunte, ¿será la guerra del garzón con el cliente?

Y luego de eso pienso, que por suerte aún la propina es voluntaria porque con un servicio así realmente uno no la deja ni de buena voluntad. ¿Usted qué opina?